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Los felinos nativos de Chile: Preservación con mirada lúdica

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A través de las redes sociales, Faunánimo comparte divertidas caricaturas de los felinos nativos con el fin de educar sobre sus características y conservación.

Por Felipe Sasso

Tomás Infante siempre ha sido amante de los animales y ha visto con preocupación el desconocimiento que existe en torno a algunas especies de fauna nativa chilena, particularmente sobre su estado de conservación. Por lo mismo, quiso aportar desde lo que mejor sabe hacer: la ilustración. Así nació Faunánimo, interesante proyecto que retrata a distintos ejemplares de animales en situaciones cómicas, aprovechando la contingencia y las características propias de cada una de las especies.

El proyecto tiene un fin educativo, y en él también participan Marcela Pizarro, psicóloga infanto-juvenil; Enrique Pérez, médico veterinario y Jaime Varela, historiador y naturalista. Tomás ha ilustrado varias especies de nuestro país, pero algunos de los que más han llamado la atención han sido los felinos nativos de Chile: el gato andino, el gato colocolo, el gato huiña, el gato Geoffroy y el puma. Conversamos con él, quien nos comentó sobre la labor comprometida que lleva a cabo con la protección de estos gatos nativos.

¿Cuántos felinos chilenos has ilustrado?

Los gatos nativos que habitan en Chile son cinco, incluyendo al considerablemente más grande que es el puma. Los he dibujado a todos, algunos en viñetas como protagonistas y a otros como secundarios en escenas más grupales.

¿Por qué has querido ilustrarlos, cuál es la intención?

Los gatos, en general, son conocidos por todos, pero muy pocos conocen a las especies de felinos nativos del país, en los que sí hay riesgos de conservación. La idea es mostrarlos y generar conciencia de estas especies que tenemos como vecinos y muchas veces desconocemos. Además, hacer hincapié en las principales diferencias físicas para identificar y diferenciar a cada uno, resaltando sus rasgos más marcados a través de las caricaturas.

En tus trabajos tomas una característica en especial de cada especie y la vinculas con la contingencia, ¿cómo definirías la personalidad de cada uno de estos felinos?

Siempre tratamos de rescatar el alma de cada animal o rasgos característicos, para mostrarlo de la manera más entretenida posible. El tamaño, hábitat, alimentación, en fin, son rasgos que ya dicen mucho y distinguen a cada uno. Por una parte tenemos al puma que es el felino más grande de Chile, mucho más grande que los otros cuatro. El gato andino lo hemos dibujado con zampoña, en alusión a su nombre (andino), es un animal bastante alejado y tímido. Está el gato huiña, que es el más pequeño y que por su nombre puede asociarse a un ladrón, transformándolo en un clásico “chico choro”, pero además es una especie que presenta melanismo (o sea que algunos son negros), en una viñeta lo asociamos con una pantera, lo que me me resulta gracioso por su reducido tamaño. Este rasgo también lo posee el gato geoffroy, el cual también suele meterse al agua. O el gato colocolo que siempre se tiende a asociar a temas futboleros.

¿Cuál es el estado de conservación de cada una de estas especies?

El gato andino se encuentra en estado de conservación “En Peligro”, estando entre los cinco felinos más amenazados del mundo, hay desconocimiento y su hábitat en el altiplano lo hace una especie difícil de conocer. Hay poca información, no se tiene certeza de cuántos años vive por ejemplo, esto pasa también con otros felinos como la huiña en el sur.

La huiña está en estado de conservación “Vulnerable”. Esta especie, así como el gato geoffroy o el gato colocolo (ambas en estado “Casi Amenazado”) tienen pelajes que han sido causa de su caza para la recolección de su piel. Todos ellos poseen manchas diferenciados entre especies. En el caso del puma, hay zonas en las que se ve una mayor concentración como en la Patagonia, pero en regiones especialmente de la zona central quedan muy pocos o ninguno. Su estado de conservación actual lo clasifica como “Preocupación Menor”.

¿Cuáles son las amenazas que deben enfrentar?

Hoy en día, el principal problema que los afecta a todos es el desconocimiento, lo que lleva a un mal manejo de conservación. Impactos en autopistas por falta de corredores biológicos, competencia por alimento por parte de fauna doméstica, perros y gatos, así como también animales introducidos como el visón. Reducción de hábitat y conflictos con ganaderos que los persiguen y ponen trampas para evitar saqueos de animales de consumo.

¿De qué forma son similares al típico gato doméstico que conocemos y tenemos en casa?, ¿cómo se diferencian?

Partamos refiriéndonos al puma, pues resulta muy interesante saber que pese a ser el carnívoro terrestre más grande de Chile, está más emparentado con los gatos domésticos que con el grupo pantera como el león, tigre, jaguar y leopardo... únicos con la capacidad de rugir, a diferencia del puma. Todos los otros felinos de Chile tienen esta misma proximidad. El gato andino se diferencia claramente de un gato doméstico por la extensión de su cola y los nueve anillos negros que ésta posee. Rasgo característico es su nariz negra y unas marcadas manchas que bajan desde sus ojos por su cara. El gato colocolo tiene reconocibles manchas en su lomo y anillos bien marcados en sus patas y cola, orejas más puntiagudas. Puede ser confundido con el gato andino, sin embargo, tiene una cola más corta, delgada y menos anillos, además, su nariz es clara. La huiña es el más pequeño, pero es más rechoncho que un gato doméstico. Un rasgo diferencial son son sus orejas redondeadas. Como dato curioso, así como los gatos domésticos tienen su caja de arena, las guiñas tienen “letrinas”. El gato Geoffroy es ligeramente más grande que un gato común, pero tienen un pelaje con pequeñas manchitas bien marcadas. Al igual que el gato huiña presenta melanismo, lo que significa que algunos individuos son negros.

¿Crees que tu trabajo sirve para llamar la atención sobre la importancia de la conservación de estas especies?

Estoy convencido y eso es lo que más me gusta de dedicarme a esto. Siento que las caricaturas que subimos son una gran herramienta para mostrar especies que se desconocen con algún rasgo que pueda caracterizarlas o tocar temas de contingencia en relación a la fauna nativa que pueda ayudar a generar conciencia e informar. Además, como Faunánimo, complementamos con información escrita más precisa lo que se muestra en la pura imagen, en un trabajo de redacción que se hace en conjunto a Jaime Varela, el apoyo científico.

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