Actualidad Animal

Vínculo entre un perro y su humano es similar al de una madre con su hijo

pexels-dominika-roseclay-4960608 |

Descubre qué pasa cuando se miran.

Descubre

qué pasa cuando se miran.

Una investigación realizada por científicos del Hospital General de Massachusetts (MGH), revelaría que la conexión de las mujeres con sus animales es tan fuerte que podría llegar a compararse con el amor hacia un hijo.

En la investigación se analizaron las diferencias en las estructuras cerebrales que se activan cuando las mujeres ven imágenes de sus hijos y de sus animales, llegando a la conclusión de que el sentimiento que puede presentar una mujer cuando ve a su hijo es muy similar al que se crea cuando esta comparte tiempo con su animal.

Experimentos llevados a cabo por un equipo de científicos del departamento de Ciencia Animal y Biotecnología de la Universidad Azabu, Japón, han demostrado que la hormona del amor, la oxitocina, es la que, con la evolución de este animal junto a su mejor amigo, ha creado una conexión, un vínculo, tan fuerte como la que se crea a nivel biológico entre padres e hijos. Así, el simple contacto visual entre el perro y su dueño fortalece sus vínculos afectivos, según concluye el estudio que recoge la revista Science.

La oxitocina, esa sustancia química que actúa como neurotransmisor en el cerebro, no solo genera vínculos afectivos entre los seres humanos sino también entre otras especies, concretamente los perros. Para demostrarlo, los investigadores llevaron a cabo varios experimentos con 30 perros (15 hembras y 15 machos) de diferentes razas y edades, y sus dueños (24 mujeres y 6 hombres).

“Cuando perro y dueño se miran, ambos muestran un aumento de la oxitocina”, afirma a Sinc Takefumi Kikusui, líder del estudio.

Las conclusiones del estudio son claras: humanos y perros refuerzan sus vínculos biológicos en un circuito neuronal impulsado por la oxitocina, de la misma forma que se construye entre individuos de la misma familia. Y la forma de crear y reforzar este vínculo es sencilla y directa: una simple mirada recíproca.

Foto de 

Dominika Roseclay

 en 

Pexels

Síguenos en:Google Noticias
Compartir: