Control veterinario Ayün durmió todo el día, no despertó, hasta las 19:30 para ir donde su veterinaria, quien lo examinó y dijo que “estaba deshidratado, con las pupilas dilatadas, presentaba movimientos atáxicos, que al parecer había sido sedado, tenido un shock de calor o fatiga muscular, pero que necesitaba hacer exámenes. Le pasaron 500 cc de suero, se recuperó un poco y al día siguiente le hicieron los exámenes, los que arrojaron que no hubo sedación, sino que tuvo una fatiga muscular y un shock de calor. El motivo de esto es exceso de ejercicio y haber estado mucho rato expuesto a temperaturas altas”, explica. Agrega que también le suministraron analgésicos. “Ayün la sacó barata, llegó en mal estado, pero recibió atención veterinaria. Llegó el lunes, el martes durmió todo el día, el miércoles estuvo un poco más activo, pero no normal y recién el jueves en la tarde se comenzó a activar. Le tenemos que hacer un nuevo hemograma para ver cómo están sus riñones, porque un shock de calor puede generar problemas renales, musculares, etcétera”. “Me llegaron muchos casos” Bárbara destaca que el error que hubo por parte del hotel fue no tener control sobre los perros. “Los sueltan, los dejan que jueguen, peleen, no se preocupan de que estén a la sombra, que no se deshidraten. Cuando hice la publicación me empezaron a llegar muchos casos de personas que les pasó lo mismo en el hotel, los perros llegaban en el mismo estado o peor, con cortes, heridas, perros muy estresados, que no comían, que lo pasaron mal. Una niña me comentó que su perro llegó con un corte enorme y se hicieron los lesos y es imposible que no se hayan dado cuenta. Otra perrita llegó sangrando con una herida de colmillos enterrados en los muslos. También supimos que tienen una denuncia en curso por ruidos molestos y malos olores. Reciben alrededor de 40 perros y no cuentan con la cantidad de gente adecuada para atenderlos, por lo que hay peleas, perros con heridas graves, una niña me contó que a su perro le tuvieron que poner ocho puntos”. La mamá de Ayün es enfática al mencionar que “estos lugares ofrecen un servicio en el que van a cuidar mi perrito, que lo va a pasar bien, va a estar como si estuviera en su casa, pero si ves que el perrito lo está pasando mal, no está comiendo, no está durmiendo, que llora, lo mínimo es llamar al tutor para avisarle y que lo vaya a buscar. En mi caso, creemos que este tema le pasó el domingo a Ayün y que por eso no lo trajeron, porque debe haber estado peor. Sé que pueden pasar cosas, que puede haber peleas, una mordida, pero deberían avisar, si un perro lo está pasando mal, no come o está estresado deberían llamar por teléfono, decir sabes que Ayün está deshidratado y lo vamos a llevar al veterinario o vengan a buscarlo”.